Autor: Severiano (Page 9 of 51)
Out of the night that covers me,
Black as the pit from pole to pole,
I thank whatever gods may be
For my unconquerable soul.
In the fell clutch of circumstance
I have not winced nor cried aloud.
Under the bludgeonings of chance
My head is bloody, but unbowed.
Beyond this place of wrath and tears
Looms but the Horror of the shade,
And yet the menace of the years
Finds, and shall find me, unafraid.
It matters not how strait the gate,
How charged with punishments the scroll,
I am the master of my fate:
I am the captain of my soul.
Después del humo negro
Hay que ser valiente y despertar
Y vivir, como vive la gente
Hay que ser valiente, amigo
Yo tengo que volar…
No, yo no puedo quedarme aquí
Si tu quieres quédate tú
Esta vida no es para mí
Yo quiero vivir con amor
Con mi gente abajito del sol
Con las olas y el amanecer
Como un niño jugando otra vez
Sin parar de correr…después…
(canijo ahora te toca a ti)
Estoy embrujado y ladro como un perro
Yo me siento un animal
La oscuridad me puede y me lleva
Si me aburro miento
Yo solito me abro las heridas
Sin idea yo retengo
El destino de mi propia vida
Yo no quiero malos rencores
Sólo busco todas las salidas
Libertad que me espera más allá del sur
Te digo que no, yo no puedo quedarme aquí
Si tu quieres quédate tú
Esta vida no es para mí
Yo quiero vivir con amor
Con mi gente abajito del sol
Con las olas y el amanecer
Como un niño jugando otra vez
Sin parar de correr
Hace mucho tiempo que he acordao yo con el viento
Con las nubes del cielo azules
Escuchar a la gente porque
Ya se sabe que eres malo
Tienes al mundo aterrorizao
Con la guerra y con los misiles
El potaje nunca lo ha probao
No se si a mi me ha pasao
Que me siento perdedor
Yo te juro por mis cuernos que tengo que seguir…
Yo te digo que no, yo no puedo quedarme aquí
Si tu quieres quédate tú
Esta vida no es para mí
Yo quiero vivir y comer jamón
Olvidar para siempre el reloj
Caminando hacia el atardecer
Como un niño jugando otra vez
Sin parar de correr
Después de un largo tiempo escondido (escondido)
Todo oscuro, con hambre y muerto de frío
Sin nada que hacer, tan solo esperar
Busco libertad, amigo mío tengo que volar…
It is not the critic who counts; not the man who points out how the strong man stumbles, or where the doer of deeds could have done them better. The credit belongs to the man who is actually in the arena, whose face is marred by dust and sweat and blood; who strives valiantly; who errs, who comes short again and again, because there is no effort without error and shortcoming; but who does actually strive to do the deeds; who knows great enthusiasms, the great devotions; who spends himself in a worthy cause; who at the best knows in the end the triumph of high achievement, and who at the worst, if he fails, at least fails while daring greatly, so that his place shall never be with those cold and timid souls who neither know victory nor defeat.